EUROPA
PRESS
22 abril
2021
Dos
patrones dietéticos que matan
La mayor parte de los estudios analizan
y señalan los alimentos que podrían ayudar a las personas a comer de forma más
saludable y reducir su riesgo de enfermedad cardiovascular, del mismo modo se
analizan las dietas, siendo las reinas de estos estudios la mediterránea o la vegetaríana, por ejemplo.
Sin embargo, al hablar de los alimentos asociados a una peor
salud o a un incremento del riesgo de diversas patologías, siempre se habla del
alimento y no tanto de los alimentos que componen esa dieta conlleva a mayor
mortalidad. Ahora un nuevo estudio, ha analizado los alimentos más comunes en
las dietas poco saludables, observando su riesgo de enfermedad cardiovascular y
muerte en la mediana edad.
Se trata de dos patrones dietéticos comunes identificados en
adultos británicos, que incluyen un alto consumo de chocolate y dulces, pueden
estar asociados con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte en la
mediana edad, según un estudio publicado en la revista de acceso abierto 'BMC
Medicine'.
Carmen Piernas, la autora correspondiente del estudio señala
que "las directrices dietéticas más comunes se basan en los nutrientes que
se encuentran en los alimentos y no en los alimentos en sí, lo que puede
resultar confuso para el público. Nuestros resultados ayudan a identificar los
alimentos y bebidas específicos que se consumen habitualmente
en Gran Bretaña y que pueden aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular y
mortalidad", señala.
Los investigadores de la Universidad de Oxford (Reino Unido)
identificaron dos dietas que se asociaban a un mayor riesgo de enfermedad
cardiovascular y muerte en la mediana edad. La primera tenía un alto contenido
en chocolate, dulces, mantequilla y pan blanco y un bajo contenido en fruta
fresca y verduras. La segunda tenía un alto contenido en bebidas azucaradas,
zumo de frutas, chocolate, dulces, azúcar de mesa y conservas, y un bajo
contenido en mantequilla y queso de alto contenido graso.
Los investigadores descubrieron que aquellos cuya dieta
incluía mayores cantidades de chocolate, dulces, mantequilla y pan blanco,
tenían más probabilidades de ser hombres, más jóvenes, de sufrir privaciones
económicas, de ser fumadores actuales, de ser menos activos físicamente, de
vivir con obesidad o de tener hipertensión, en comparación con aquellos cuya
dieta no incluía altas cantidades de estos alimentos.
En este grupo, los individuos menores de 60 años o que
vivían con sobrepeso u obesidad tenían un mayor riesgo de enfermedad
cardiovascular que los individuos mayores de 60 años o que no vivían con
sobrepeso u obesidad.
Aquellos cuya dieta era rica en bebidas azucaradas, zumos de
frutas y conservas presentaban un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y
mortalidad, aunque también solían ser físicamente activos y tenían menos
probabilidades de ser fumadores actuales o de vivir con obesidad, hipertensión,
diabetes o colesterol alto, que los que no seguían esta dieta. Las mujeres, los
individuos menores de 60 años o los que vivían con obesidad, en particular,
tenían un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular si consumían una dieta rica
en estos alimentos.
Para examinar los efectos de la dieta en el riesgo de
enfermedad cardiovascular y mortalidad, los autores analizaron los datos
recogidos de 116.806 adultos de Inglaterra, Escocia y Gales que fueron
reclutados en el Biobanco del Reino Unido entre 2006 y 2010. Los participantes
tenían entre 37 y 73 años, con una edad media de 56 años.
Los participantes informaron de los alimentos que habían
ingerido durante las 24 horas anteriores en entre dos y cinco ocasiones. A
continuación, los investigadores identificaron los nutrientes y los grupos de
alimentos ingeridos por los participantes. La incidencia de las enfermedades cardiovasculares
y la mortalidad se calculó a partir de los registros de ingresos hospitalarios
y de defunción hasta 2017 y 2020, respectivamente.
Los autores advierten que la naturaleza observacional del
estudio no permite sacar conclusiones sobre una relación causal entre la dieta,
la enfermedad cardiovascular y la mortalidad. Además, como los datos dietéticos
se tomaron de evaluaciones individuales de 24 horas y no de un periodo de
tiempo continuo, puede que no sean representativos de la dieta de los participantes
a lo largo de su vida. En futuras investigaciones se podrían estudiar las
posibles razones de las asociaciones entre las dos dietas investigadas en este
estudio y las enfermedades cardiovasculares y la mortalidad, señalan.
"Nuestra investigación sugiere que comer menos
chocolate, productos de confitería, mantequilla, pan bajo en fibra, bebidas
endulzadas con azúcar, zumo de frutas, azúcar de mesa y conservas podría estar
asociado con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular o muerte durante la
mediana edad, destaca Carmen Piernas. Esto es coherente con investigaciones
anteriores que han sugerido que el consumo de alimentos que contienen menos
azúcar y menos calorías puede estar asociado con un menor riesgo de enfermedad
cardiovascular".